WILFREDO CANCIO ISLA
El Nuevo Herald
La huelga de hambre de Ramón Saúl Sánchez, presidente del Movimiento Democracia, cumple hoy 15 días en medio de un creciente respaldo de grupos
comunitarios y de dos acciones legales contra el gobierno estadounidense por supuestas violaciones de los derechos constitucionales del huelguista.
La Unión Americana de Libertades Constitucionales (ACLU) anunció el martes su apoyo a la causa del activista cubano mediante una demanda legal,
presentada en una corte federal en Miami.
``Básicamente, nuestra demanda reclama que se le permita [a Sánchez] permanecer en el área del edificio federal Claude Pepper y cuestiona la forma en que le fue confiscado el barco Derechos Humanos'', dijo John De León, presidente de la filial local de ACLU.
Sánchez no recibió autorización para realizar su ayuno en el edificio federal, y tuvo que situarse en una carpa ubicada en la acera de enfrente, que pertenece a la Ciudad de Miami.
La embarcación, de 39 pies de eslora, fue confiscada por el Servicio de Aduanas el pasado 10 de diciembre, a 50 millas del territorio cubano. Ese día seis miembros del Movimiento Democracia viajaban hacia la isla con copias de la Declaración Universal de Derechos Humanos.
Por otra parte, abogados que representan a esa organización, tienen listo otro recurso legal oponiéndose al decreto presidencial que establece una zona de seguridad de tres millas alrededor de la península de la Florida.
``Estamos pidiendo que la embarcación le sea devuelta de inmediato por considerarlo una acto inconstitucional'', dijo el abogado Joseph Geller, quien insistió en que la demanda se presentaría a más tardar la mañana del miércoles.
Agrupaciones de exiliados cubanos estarán manifestándose junto a Sánchez durante una concentración masiva anunciada para el mediodía de hoy.
Luego, a las 4 p.m. camioneros independientes protagonizarán una caravana de solidaridad, que partirá desde Okeechobee y la avenida 103 hasta el centro de Miami. Dos horas después aviones del grupo Democracia sobrevolarán el downtown en señal de apoyo.
``Creo que se está creando una fuerte presión por parte de la comunidad'', comentó Sánchez el martes a El Nuevo Herald. ``Por aquí han pasado miles de personas de todas las nacionalidades y grupos étnicos''.
El huelguista se mantiene ingieriendo solamente agua. Ha tenido irregularidades en su presión arterial y no puede pararse sin ayuda. ``Me siento espiritualmente fuerte y confío en que triunfaré en esta batalla, porque no estoy defendiendo únicamente la devolución de un barco, sino la reivindicación de un principio'', dijo.
